Salteado de verduras con arroz Basmati y langostinos

 

Cómo preparar un salteado de verduras con arroz basmati y langostinos

Un buen salteado de verduras con arroz basmati y langostinos es una apuesta segura, y tan fácil de preparar que no tienes excusa para no hacerla. Mientras se cuece el arroz, preparas las verduras y luego no tienes más que añadir los langostinos, el arroz escurrido y un poco de salsa de soja. En menos de media hora tienes una cena estupenda, para compartir o para ti solo.

Y es que eso es lo bueno de este tipo de recetas orientales sencillas, que son exóticas pero las puede hacer cualquiera. No importa si no eres muy hábil en los fogones, cortar, cocer y saltear sí sabrás, ¿no?. Por si eso fuera poco, resulta que para hacer este salteado solo vas a manchar una tabla, un cazo, y una sartén. Todo son ventajas en esta receta.

Si no te gustan las verduras que nosotros hemos puesto (tirabeques, zanahoria, calabacín y berenjena) puedes elegir tus verduras favoritas. Si no te gustan los langostinos, puedes ponerle gambas o no ponerle nada. También puedes inspirarte en esta otra receta de salteado con pollo y berenjena.

En definitiva, que de verdad no se nos ocurre qué excusa podrías poner para no hacer esta receta salteado de verduras con arroz basmati y langostinos. Pruébala y nos cuentas.

Langostinos, un ingrediente gourmet con un gran valor nutricional

Un clásico de las cenas navideñas en España, los langostinos no son solo una excelente elección si queremos sorprender con una cena gourmet a nuestros comensales, sino que también es una elección de alto valor nutricional.

Este crustáceo, que puede llegar a medir hasta 25 centímetros de longitud, tiene un alto valor proteico y no contiene hidratos de carbono, lo que lo convierte en una excelente elección para una dieta baja en calorías y azúcares. Tiene, además, poca grasa, pero un nivel considerable de ácidos grasos omega-3. Otros nutrientes reseñables en su composición son el yodo, el fósforo, el selenio, el calcio, el magnesio y el zinc, entre los minerales; y las vitaminas B12 y B3.

No obstante, pese a su gran valor nutricional, su contenido en colesterol es elevado, lo que deberá ser tenido en cuenta en el caso de dietas especiales, en las que se requiera reducir el consumo de esta sustancia.

Pero, si no se tienen restricciones de este tipo, el consumo de langostinos es muy recomendable debido a su composición proteica, sobre todo en etapas de desarrollo, como la infancia y la adolescencia, o durante el embarazo, y para deportistas, que necesitan fortalecer su musculatura.

Además, la abundancia de yodo presente en este alimento es beneficiosa para el metabolismo, ya que ayuda a regular el nivel de energía y el correcto funcionamiento de las células. Además, el yodo de los langostinos ayuda a regular el colesterol, lo que contribuye a compensar el alto nivel de esta sustancia en su composición. El hecho de ser un alimento rico en yodo también permite que ayude a procesar los hidratos de carbono en el organismo, fortalecer el cabello, la piel y las uñas.